El Padre Lenin Bastidas es recibido por cientos de vallepascuenses
Valle de la Pascua.- El Sacerdote Lenin Bastidas, expárroco de la iglesia de Nuestra Señora de la Soledad, en el estado Anzoátegui, que el pasado lunes 22, emprendió un recorrido hasta Caracas, arribo a la ciudad de Valle de la Pascua en horas de la tarde de este miércoles, donde fue recibido por cientos de vallepascuenses, quienes con banderas, aplausos y alegría lo recibieron para manifestarle su apoyo en esta cruzada por la paz y la reconciliación en Venezuela.
Luego de haber pernotado la noche anterior en la población de Santa María de Ipire, continuando su recorrido en horas del mediodía de hoy llegó al municipio El Socorro donde acompañado por un grupo de personas se dirigió hasta la plaza Bolívar donde bendijo esta tierra Llanera.
Desde tempranas horas de la tarde de este martes, cientos de vallepascuenses se concentraron en el peaje ubicado a la salida a la población de El Socorro para recibir y darle la bienvenida a la Encrucijada del Esfuerzo al Padre Lenin Bastida.
A su llegada se trasladó al puesto de la GNB para saludar y bendecir a los efectivos de ese componente militar, invitándolos a cumplir y hacer cumplir la Constitución de la Republica.
Posteriormente fue abordado por los distintos medios de comunicación para conocer el motivo que lo llevo a renunciar a la parroquia y realizar esta cruzada.
“En Valle de la Pascua me encontré a muchísima más gente de la que me imaginaba, y a toda la gente se le ve en el rostro la alegría, la esperanza. Voy a Caracas con la intención de liberar al pueblo venezolano del odio y del rencor”.
Al ser consultado sobre su estado físico dijo lo siguiente: “Yo puedo tener dolencias físicas, pero tengo un espíritu y una voluntad que me impulsarán hasta donde Dios me permita llegar”.
Dijo estar decido y temerle a nada: “yo no tengo miedo, si me detiene la muerte que me detenga, si me detiene una enfermedad en este camino que me detenga, pero lo importante es que sepan que después que decidí dar este paso no hay nadie que me detenga, yo ofrezco mi vida en esta lucha”.
Aclaró que la única manera de desistir de seguir caminando es que la Conferencia Episcopal convoque a una vigilia para que reconozca la crisis humanitaria que vive Venezuela. Que esta vigilia de ayuno y oración permanente frente a la sede del CNE, permita buscar una salida democrática a la crisis.
Para este jueves a primera hora de la mañana está previsto que el sacerdote continúe su recorrido a la capital guariqueña
